Filomeno, una novela de Daniel Liebsohn

Categories: 03 Mar 2013

FILOMENO, La historia detrás de la fotografía

“A Filomeno lo compre en la Lagunilla a los 14 o 15 años, aunque no recuerdo el precio, me costó todo mi domingo” comenta Liebsohn al hablar de la fotografía que da titulo a su primer novela, lo cierto es que se trata de un retrato sumamente particular que ha estado con él por más de 25 años, y que si bien forma parte de su impresionante colección, no se trata de una de las obras más valiosas, sino por el contrario podría ser considerada como una de las más sencillas, pero a veces tanta sencillez puede resultar complicada.
En este caso la reacción provoco una fascinante novela y no sólo eso, sino también un espacio, mismo que Liebsohn ha ido decorando según el criterio y la estética del propio personaje, en realidad se trata de un proceso creativo para evocar un lugar, lo curioso es que durante todo este proceso el autor se ha ido encontrando por su paso una serie de objetos pertenecientes a cada uno de sus personajes mismos que dan vida a un extenso y magnifico archivo fotográfico.
La pregunta obligatoria aquí seria cuestionarnos ¿Si se trata de una historia de ficción o si estos personajes con sus retratos y sus objetos fueron contando su propia historia.
¿Una serie de extrañas coincidencias o…simplemente un juego del destino?

Filomeno, primer novela del anticuario y coleccionista Daniel Liebsohn, que logra a través de retratos, pinturas, documentos, cartas y objetos personales de cada uno de sus personajes fusionar las delicias del periodo porfiriano en una narrativa llena de humor, pudor, nostalgia, excentricismo y una fuerte carga erótica.
La historia da inicio en el momento en el que Filomeno -nuestro protagonista- es fotografiado, recargado en un falso pedestal, donde apoya su sombrero luciendo su recto perfil rematado por un bigote y una puntiaguda barba.
A partir de ahí, Filomeno recuerda con nostalgia su llegada a Zacatecas, el viaje que emprendió a Londres y su paso por Cuba, para terminar un año más tarde en la ciudad de México.
¿Cómo la vida puede dar tantas vueltas?
Tantos sueños, tantas pasiones, tantos deseos y tantas historias que con el tiempo se vuelven efímeras, pero una fotografía captura el alma eternamente.